Quizá el error mas grande que cometen los organismos intergubernamentales como lo son la OMC, la GATT y el FMI, es creer que sus políticas son universales y que funcionan por igual en cualquier estado nación, es por eso que en muchas de las ocasiones estos organismos son vistos con pavor. Pero en realidad las funciones de estas organizaciones es estimular el libre comercio, por medio de mecanismos políticos que permitan a los mercados financieros y comerciales fluir con el menor número de restricciones posibles, con la finalidad de impulsar el desarrollo. Pero también es cierto, que estas políticas, si no son bien encausadas por los países beneficiados, suelen ser catastróficas y hundir mas a los países a quienes pretendían ayudar. Brasil es un claro ejemplo de que estas políticas bien encausadas y adecuadas son efectivas.
Si un estado nación desea incorporase a una flujo de comercio que aporte beneficios a su país, debe de incorporarse o crear un bloque comercial a la medida de la dotación de sus recursos, de tal forma que pueda ser competitivo.
Para que una empresa o una pyme puedan ser competitivos dentro de cualquier bloque comercial, debe gestionar nuevas estrategias que maximicen sus debilidades y exploten al máximo sus fortalezas, con la finalidad producir con una calidad altamente competitiva a un costo mas bajo. En particular para México y Brasil considero que es más apropiado internarse en zonas de libre comercio (ZLC). Las características de una ZLC permiten que las empresas obtengan insumos más baratos procedentes de los países miembros, y a su vez, las mismas empresas puedan exportar a otros mercados productos más económicos y de buena calidad. En la actualidad México pertenece a La Unión de Naciones Suramericanas (UNS), Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI), Tratado De Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Brasil pertenece a La Unión de Naciones Suramericanas (UNS), Mercado Común del Sur (Mercosur), Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI)